Por: Tony García
Recuerdo tomar un café en una de las calles más concurridas de la ciudad de Panamá, en un viaje reciente en el mes de agosto cuando acompañamos a la Liga Frenicol 23 a la ciudad canalera.
Es tan alto el grado de educación y no solo me refiero a la parte académica, más bien el grado de civismo que exhibe el ciudadano común, la forma en cómo respetan las normas cotidianas de convivencia refleja el progreso de esa nación y no queremos referirnos a la parte económica, sino a su crecimiento en valores.
El deporte no es la excepción, la percepción que tienen de sus grandes exponentes en el béisbol, baloncesto y no puede faltar el astro del boxeo Roberto (mano de piedra) Duran.
Hacemos énfasis en el béisbol ya que ellos cuentan con dos ex peloteros en el salón de la fama de cooperstown, Rod Carew y Mariano Rivera, este último electo de manera unánime al nicho de los inmortales.
Panamá cuenta con instalaciones deportivas de gran infraestructura, el estadio Rod Carew fue quien salvó la serie del caribe en el 2019, la cual estaba pautada a llevarse a cabo en Venezuela, pero los conflictos sociopolíticos de este entonces evitaron que allí se efectuara el clásico caribeño y que se escogiera Panamá como la sede.
Otra instalación de gran envergadura es la arena Roberto Duran, escenario utilizado para grandes partidos de la selección nacional de baloncesto, presentaciones artísticas y otros espectáculos, el gran funcionamiento de su sistema de aire acondicionado y la majestuosidad de sus dimensiones dejan en claro que no tiene que envidiarle nada a cualquiera otra instalación de tal magnitud.
Que pasen un excelente día y ojalá poder volver a tomar otro café, pero en la cinta costera de esta gran ciudad.
